1Prepare la masa para focaccia y deje levar, es decir, ponga en la masa en un recipiente y tape con un paño limpio; dos horas en un lugar templado hasta que duplique su tamaño.
2Precaliente el horno a 220°C. Engrase ligeramente con aceite una charola para pizza de veintiocho centímetros.
3Pase la masa esponjada a una superficie de trabajo ligeramente enharinada y amase durante uno ó dos minutos. Coloque la masa en la charola preparada y extiéndala utilizando las yemas de sus dedos.
4Caliente una sartén grande sobre fuego medio. Añada el tocino y fría alrededor de cinco minutos, hasta que esté crujiente y dorado.
5Despedace el tocino sobre la masa. Cubra con la cebolla de cambray, la nuez y el queso. Hornee de veinte a veinticinco minutos, hasta que se esponje y dore.